Revitalízate en la primavera

Complementa tu alimentación, mantén una buena hidratación y activa tu cuerpo y mente. Son los tres pilares fundamentales sobre los que se basan estos consejos para "estar bien y sentirse mejor".

Duerme:

El sueño reparador es necesario siempre, pero más en primavera. Procura acostarte y también levantarte a la misma hora todos los días.

Vigila tu alimentación:

La primavera es buen momento para rediseñar la dieta y aumentar la presencia de cereales, legumbres, frutas y verduras de temporada. Desayuna fuerte para afrontar la jornada, haz una comida fuerte y una cena ligera, para conciliar mejor el sueño.

Actívate:

Una dieta equilibrada te ayudará a mantener un buen tono vital. Sin embargo, en algunas ocasiones es necesario complementar la alimentación, si ésta es insuficiente o en situaciones de especial desgaste. Cuando la situación lo requiera y siempre bajo prescripción, se pueden tomar complejos vitamínicos o minerales, ricos en vitaminas del complejo B, vitamina C, hierro o magnesio, entre otros.

Vigila las alergias:

En primavera hacen su aparición y algunos síntomas como ojos llorosos o estornudos pueden ser una señal. Ante los primeros síntomas consulta a tu médico.

Hidratate bien:

Bebe al menos de litro y medio a dos litros de líquido al día, preferiblemente de agua mineral. Esto mantendrá el organismo hidratado, una buena función renal e intestinal y una piel con buen aspecto. Refuerza también tu piel desde el exterior con algún tratamiento facial y corporal.

Complementá tu dieta:

Jalea real, polen, levadura de cerveza, guaraná, ginseng... Además de conseguir un mayor tono vital, tu pelo y tu piel resplandecerán.

Haz ejercicio:

El ejercicio moderado ayuda a liberar tensiones y predispone el cuerpo para el descanso nocturno. Caminar a buen ritmo al menos media hora al día, puede ayudarte a recuperar un buen tono vital.

... Y sonríe:

Mantén una actitud positiva y ríete siempre que puedas. La risa es una gran medicina.